En una época en la que son varios los deportes que están intentando atraer a las féminas, el baloncesto es el deporte favorito de las mujeres en nuestra Comunidad, con unas cifras de récord en la pasada temporada -6.438 licencias- una cifra que representa el 43% del total de licencias -15.173-.
Por categorías las 6.438 féminas aragonesas se dividieron en la temporada 2018-2019 de la siguiente forma: Sénior (709), Júnior (513), Cadete (1.100); Infantil (957); Preinfantil (467), Alevín (1.112); Benjamín y Escuelas (1.580).
Las cifras de la base, con 2.692 chicas jugando en ‘mini’ hacen pensar que el baloncesto femenino puede seguir creciendo en los próximos años.
Aunque el baloncesto femenino aragonés tiene un amplio margen de crecimiento en las categorías júnior y sénior, en las que el baloncesto masculino tiene muchas más licencias.
Los datos indican que las chicas tienden a dejar la practica del baloncesto cuando acaban la etapa cadete y júnior. Y en este sentido se están estudiando diferentes iniciativas desde la FAB para animar a las chicas a que sigan jugando. Dos de ellas, además de las diferentes actividades de promoción, es la de fomentar la figura de la entrenadora y crear una Liga Social, al igual que ya ocurre con gran éxito en masculino.
BALONCESTO, UN DEPORTE IGUALITARIO
FUENTE: LA VANGUARDIA Ver artículo completo
Las encuestas sobre práctica deportiva indican que el número de deportistas femeninas ha aumentado.
Pedrona Serra, experta en género y deporte y profesora del INEFC Barcelona reconoce que el deporte femenino está mejor que hace unos años, pero señala que todavía existe una división por deportes.
El fútbol, por ejemplo, sigue siendo considerado socialmente un deporte de chicos, aunque cada vez haya más equipos femeninos.
En cambio, el baloncesto ocupa un lugar intermedio: hay mucha práctica deportiva femenina y tiene una representación más igualitaria entre chicos y chicas. El hecho de que sea un deporte con mayor igualdad de género no se debe tanto al tipo de juego o a la táctica sino a la forma en que este deporte se ha socializado.
“Desde siempre, el baloncesto ha sido considerado un deporte al que jugaban tanto chicos como chicas, y eso ha facilitado esta igualdad”, comenta Serra.
