COMUNICACIÓN FABASKET Esta semana entrevistamos a Irene Rubio Alejandre, una de las jugadoras aragonesas más reconocidas de la generación del 2001, que ha formado parte de las selecciones aragonesas de alevín, infantil y cadete y que lleva ocho años jugando en el Stadium Casablanca, club con el que conquistó la medalla de plata en el Campeonato de España Cadete 2017.
¿Cuándo y cómo comenzó tu afición por el baloncesto?
Fue en 3º de Primaria cuando empecé a practicarlo en el colegio como una actividad complementaria a fútbol, que es lo que realmente me gustaba por aquel entonces. A partir de ese momento empezó a interesarme más y veía algún partido por la televisión.
¿Qué recuerdos tienes de tus inicios en el Alierta Augusto?
Sólo guardo buenos recuerdos de mi etapa en la Agrupación. Tuve la suerte de poder jugar con muchas chicas que eran de colegios distintos al mío y compartir tantas horas en el patio del recreo con tan buenas personas. Estoy muy agradecida a mis primeros entrenadores por la forma en que me iniciaron en este deporte.
Siendo Preinfantil te incorporas a tu club actual, donde vas a cumplir tu octava temporada. ¿Qué ha significado para ti formar parte del Stadium Casablanca?
Cuando llegué al Stadium Casablanca no estaba ni siquiera acostumbrada a jugar en pabellón. Desde el primer momento he podido competir a un nivel muy alto y mejorar mucho técnicamente. Y a unque aquí la exigencia es mayor, nunca he dejado de pasármelo bien.
Has jugado siete Campeonatos de España, entre ellos, tres formando parte de las selecciones aragonesas de alevín, infantil y cadete. ¿Qué ha significado para ti vestir la camiseta de Aragón?
Es una oportunidad única y siempre me ha hecho mucha ilusión poder representar a mi Comunidad. Creo que a todo el mundo que le preguntes dirá que se vive de una forma muy especial y que cada campeonato tiene algo diferente.
¿Cómo viviste el parón de las competiciones en el mes de marzo por la COVID-19?
Al igual que a la mayoría de la gente, nos pilló por sorpresa. Estábamos en nuestro mejor momento de la temporada, ya que veníamos de una muy buena dinámica y de ganar partidos importantes. Teníamos muy buenas sensaciones y fue una pena no poder terminar la competición.
Actualmente y al formar parte de un equipo de competición nacional, el Anagan Casablanca de la Liga Femenina 2, puedes entrenar y jugar. ¿Cómo lleváis todo el tema de los protocolos para intentar evitar contagios?
Puede parecer pesado todo el protocolo, pero al final son cosas que hemos incorporado en nuestra rutina semanal. Tenemos muy claro que lo más importante es la salud y que hay que ser responsables si queremos seguir entrenando y jugando partidos. Al final todas las normas a seguir, incluso la incertidumbre que tenemos siempre de cara al fin de semana, se ve compensada con la posibilidad de seguir compitiendo con “normalidad”.
Eres una de las jóvenes elegidas para formar parte del Anagan Stadium Casablanca de la Liga Femenina 2. ¿Qué significa para ti jugar en la División de Plata del baloncesto nacional?
Ha sido un cambio muy grande haber dado el paso de la 1ª Nacional a Liga Femenina 2. Estoy muy contenta de poder jugar a un nivel más alto y con rivales más exigentes tanto técnica como físicamente. Esta nueva oportunidad que me ha dado el club me vendrá muy bien para seguir desarrollándome como jugadora y mejorar muchos aspectos de mi juego.
¿Cómo estás viendo el nivel del Grupo C de la Liga Femenina 2?
Antes de empezar la competición ya sabíamos que iba a ser un grupo de mucho nivel y que ningún partido iba a ser fácil. Está siendo todo muy igualado, en donde la mayoría de partidos se están ganando por la mínima. No podemos permitirnos relajarnos en ningún momento si queremos conseguir una buena clasificación.
¿Qué objetivos os habéis marcado para esta temporada en la Liga Femenina 2?
En todo momento hemos tenido claro que lo más importante es seguir trabajando en nuestra formación y aprender de la nueva categoría. Uno de nuestros objetivos principales sería competir al máximo sin perder nuestro estilo de juego. A nivel personal, por supuesto que es importante que disfrutemos en pista y no dejemos de pasárnoslo bien.
¿Cuáles son tus mejores recuerdos en el baloncesto?
Como todos los jugadores tengo algunos partidos que recuerdo especialmente, ya sea por el marcador, valoración personal o desarrollo del encuentro. Pero algo que siempre se me viene a la cabeza es cuando jugamos la final del Campeonato de España de Clubes en categoría cadete. Aunque en la final el resultado no fue como nos hubiese gustado, fue la culminación de un campeonato en el que lo dimos todo y supimos solventar cada situación. Para mí fue algo muy especial poder celebrar la medalla de plata con las que, además de compañeras, eran mis amigas y todos nuestros familiares.
¿Qué es lo mejor que te ha dado el baloncesto?
Sin ninguna duda me quedo con todo el mundo que me ha ido acompañando durante todos estos años. Gracias a este deporte he podido conocer gente maravillosa y puedo asegurar que me llevo muy buenas amistades. Creo que ha sido muy importante la buena química que ha habido siempre en el vestuario y eso se ha visto luego reflejado en la pista.
¿Qué personas te han ayudado más en el baloncesto?
No podría quedarme con alguien en concreto ya que he tenido muchos entrenadores y todos ellos han sabido aportarme algo diferente y sacar lo mejor de mí. Siempre me he sentido muy apoyada por mi familia y las personas de mi alrededor, lo que en parte hace que siga trabajando cada día y disfrutando de este deporte.
Hay muchas jóvenes que dejan de jugar al baloncesto porque dicen que no lo pueden compaginar con los estudios, en el primer o segundo año senior. ¿Qué opinas?
Al final es una decisión personal y cada una tiene que hacer un balance de lo que para ella es el baloncesto. Creo que hay que saber organizarse muy bien para poder llegar a todo si quieres obtener buenos resultados tanto en el ámbito académico como en el deportivo. Yo personalmente tengo claro que los estudios son lo primero, y aun así mi nivel de compromiso con el equipo no se ha visto afectado en ningún momento.
¿Qué mensaje le darías a las jóvenes que comienzan a jugar en las Escuelas?
Lo más importante es que se lo pasen bien. Partiendo de esa base, deberían aprovechar cada entrenamiento porque solo con esfuerzo lograrán dar un paso más en su formación. Ser conscientes de que cualquiera puede llegar a jugar a un buen nivel con trabajo diario y dedicación. Y eso les permitirá obtener la motivación que necesitan y disfrutar del baloncesto desde el primer día.
¿Qué esperas del baloncesto en el futuro?
No quiero pensar a largo plazo pero tampoco ponerme ninguna barrera. No voy a hacer planes de futuro porque el tiempo me dirá cuál es mi lugar en todo momento. De todas formas, espero seguir estando bien físicamente y que me respeten las lesiones para poder continuar pasándomelo bien.